Elecciones USA: El Triunfo efímero de la Impunidad y el Satanismo.
La Democracia Norteamericana es igual a las de las Repúblicas Bananeras.
Hay una profecía de volver al bosque
de que la selva, un gran jaguar-serpiente,
cobrará vida en los corazones humanos de nuevo.
Hay una gran lección en este triunfo efímero de la facción satánica, apoderada aún por el momento del control de los Estados Unidos de Norteamérica y de gran parte del Mundo: El llamado “Estado de Derecho”, se ha convertido en letra muerta, en basura que sólo es útil para mantener la mascarada y la patraña de una “civilización” sujeta a leyes.
Lo que la ciudadanía despierta, de los USA, ha podido contemplar en esta contienda electoral y sus resultados, es el triunfo de la ilegalidad llevado a lo absurdo. Sólo los ignorantes y los zombies, sujetos a un gigantesco y demencial aparato de Control Mental Psicotrónico, diversificado y sutil, pueden ponerse a festejar este remedo de triunfo caricaturesco y efímero, que no podrá sostenerse mucho tiempo. Toda estadística de preferencias, en este momento, es basura. La realidad se vió en las calles, en los mítines y manifestaciones diversas que exigían el legítimo escrutinio de la verdad, cuyo derecho les ha sido negado. Trump ha sido traicionado arteramente por su propio partido, por los altos mandos del ejército, por el sistema de justicia y hasta por sus propios allegados, como su yerno Kushner. El olor a azufre que se desprende de esta Alta Traición es proverbial. Pero, cuidado, Trump no ha sido derrotado; esta Alta Traición no significa un triunfo para sus perpetradores, por el contrario. Paradójicamente, Trump sale fortalecido en lo personal, y la facción patriota, dentro de las fuerzas armadas y los servicios de inteligencia, aún está incólume, con un respaldo popular que representa un capital político enorme, que seguramente será utilizado en una nueva coyuntura, que se percibe no muy lejana.
Técnicamente, lo que estamos presenciando en la declaración de Pence, al otorgarle el triunfo a la facción de Joe Biden y de Hamala Harris, es la culminación de un Golpe de Estado, en el que las instituciones de justicia, de representación, de los medios masivos, de inteligencia y militares, están absurda y descaradamente comprometidos en Alta Traición. El mejor ejemplo de esta afirmación, es el video que muestra a Mike Pence recibiendo su moneda de plata, después de validar un conteo amañado de votos electorales y declarar triunfante a la facción de criminales promovidos por el “Pantano Profundo”.
El Ejército Norteamericano está claramente expuesto, demostrando que no es más que la mayor banda armada, al servicio no de su pueblo, sino del Narcoimperialismo, adueñado del Mundo. El Departamento de Justicia y el FBI; la Suprema Corte de Justicia y las Cortes Supremas de Justicia estatales, la CIA, la DEA, han quedado al descubierto: son mercenarios al servicio de las fuerzas oscuras, que pretenden imponer un Nuevo Orden Mundial, y el exterminio masivo de la mayor parte de los seres humanos.
¿Qué pasó con el Kraken? ¿Qué pasa y qué pasará con los equipos de votación “Dominion”, “Smartmatic” y sucedáneos? ¿Quiénes tienen realmente el control de ellos? ¿Qué fue del allanamiento del centro de control de Frankfurt? ¿Qué de las pruebas que ahí se obtuvieron? ¿En cuántos y en cuáles países están operando estos mismos sistemas?
El Instituto Nacional de Electores, de México, tiene ya preparado un fraude masivo con ese hardware y ese mismo software, para las próximas elecciones federales y estatales del 2021. ¿Tiene AMLO los mecanismos adecuados para revertirlo? Contra él y su gobernanza están trabajando al unísono la CIA, la DEA, el Embajador Landau y William Barr, del Departamento de Justicia, cuya traición quedó claramente evidenciada al minimizar las pruebas del fraude más escandaloso no sólo de los USA, sino de todo el Mundo.
Véase desde el punto de vista que se quiera, el Modelo electoral democrático, de la que presumía ser la Nación más libre y democrática del planeta, ha quedado colapsado y obsoleto. ¿Quién podrá ahora confiar en un sistema electoral específicamente diseñado para el fraude ahora que ha quedado claramente expuesto?
Les diré lo que veremos precipitarse de manera acelerada, aunque sea sólo de una forma transitoria:
- Un incremento exponencial y acelerado de la “Plandemia”, con nuevas cepas de virus mucho más agresivas y mortales. La vacunación masiva, será sólo una preparación del caldo de cultivo humano, para que esas cepas mucho más agresivas encuentren un terreno más propicio para su efectividad mortífera. La OMS se verá reforzada en sus orientaciones impositivas.
- Las medidas draconianas fascistóides estarán a la orden del día, amplificadas en su excepcionalidad represiva y autoritaria. El confinamiento y la separatividad se incrementarán a niveles superlativos, nunca antes vistos. La obligación de la vacuna será inexclusable y sólo los más hábiles y decididos podrán evitarlas, apartándose de las ciudades del miedo.
- La pedofilia y los sacrificios humanos serán llevados a un extremo nunca antes concebible. Los acusados actuales de esas prácticas, serán exonerados y “reivindicados”. Continuará la desaparición forzada de miles de niños y jóvenes, para satisfacer las adicciones al adrenocromo, a las transfusiones de sangre, a los sacrificios rituales y a la venta de órganos; pero no podrá ser por mucho tiempo.
- La Economía mundial, y la economía de las naciones serán colapsadas de manera controlada. Explotarán las burbujas financieras y las redes de suministros. El “crea caos y compra barato”, de George Soros y Bergoglio, será aplicado a fondo, realizando una confiscación general de bienes que favorecerá sólo a los grandes plutócratas.
- En este punto, tratarán de imponer el reseteo mundial, la moneda única universal y su tan anhelado Nuevo Orden Mundial.
- Buscarán ansiosa y desesperadamente estallar algún conflicto que provoque el inicio de la IIIa Guerra Mundial. Ucrania, Irán, Venezuela, Corea del Norte, Taiwan o Hong Kon, podrían ser el detonador; aunque es altamente improbable que puedan consumarlo.
- Pero nada saldrá como lo han venido planeando y pensando desde hace décadas. Viene también lo imprevisible. La Alianza por la Tierra, los Sombreros Blancos y las Sociedades del Dragón Blanco, sacarán las cartas que guardan escondidas debajo de la manga, y el triunfo efímero, será revertido.
“Cuando los EE.UU. derrocaron a los talibanes a raíz del 9/11 dentro de su recién lanzada “guerra contra el terrorismo”, sentó las bases para el crecimiento explosivo de la industria del opio en Afganistán. Pocos meses antes de la invasión se llevara a cabo, los talibanes fueron noticia por haber “terminado drásticamente con el comercio de opio masivo del país” después de que el líder del grupo fundamentalista hubiera declarado que la sustancia era antiislámica. En ese momento, el opio de Afganistán se usaba para producir el 75 por ciento de la heroína del mundo.
Pero a pesar de ser aplastado por los talibanes, el mercado del opio hizo una reaparición dramática inmediatamente después de la invasión de Estados Unidos en octubre de 2001. No sólo se restableció el tráfico de opio, sino que aumentó drásticamente, pasando de un nivel de producción de 185 toneladas bajo el régimenTalibán (antes de la prohibición de la producción) a 3.400 toneladas en 2002.
Más de una década después, la cantidad de opio cosechada cada año siguió aumentando. El opio de Afganistán ahora se utiliza para producir el 90 por ciento de la heroína del mundo. Este incremento ha sido supervisado directamente por las fuerzas estadounidenses, que abiertamente custodian los campos de amapola de Afganistán . De hecho, durante ese mismo tiempo, el gobierno de Estados Unidos afirmó haber gastado 8.4 mil millones de dólares en programas antinarcóticos en Afganistán.
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Algunos han especulado que el regreso de Corea del Norte a la producción de opio ha llamado la atención de la CIA, ya que la agencia de inteligencia tiene un historial de involucrarse en el comercio de opio y drogas en general , como lo demuestra su bien documentado hábito en la gestión de suministros de narcóticos de América Latina a Asia.
Además, la adicción a los opiáceos — ya sea en analgésicos opiáceos legales y drogas ilegales — está creciendo en los EE.UU., consumiéndose más que nunca opio dentro de América. La aparición de esta epidemia coincidió con la ocupación de Afganistán por los EE.UU.. Entre 2002 y 2013, el consumo de heroína de Estados Unidos aumentó un 63 por ciento , alcanzando un máximo de los últimos 20 años . Las Sobredosis de heroína se cuadruplicó en los EE.UU. en ese mismo plazo.
Las acciones del gobierno de Estados Unidos también sugieren que se trata de proteger la producción de opio, como se ha puesto de manifiesto en su ocupación de Afganistán. Por ejemplo, los EE.UU. se oponen vehementemente a los esfuerzos de legalización del opio y el Departamento de Estado se niega a reconocer la erradicación de opio como principal objetivo, a pesar de los miles de millones que se han gastado en programas antinarcóticos.” (Antonio Fernández, 2017)
Para vergüenza de la ciudadanía norteamericana, ese es realmente el monstruoso ser que ha sido creado, al que llaman sus Fuerzas Armadas, ahora con toda su alta oficialidad implicada en Alta Traición a su Constitución y a su Patria. Ante esa Alta Traición, Donald Trump, se vió imposibilitado de aplicar el Estado de Emergencia que tenía previsoriamente previsto en la Orden Ejecutiva que emitió en el 2018, en el caso de que hubiese intevención extranjera de cualquier tipo en estas elecciones del 2020.
La lucha no ha terminado. Donald Trump no es el tipo de persona que se rinda fácilmente; y la facción patriótica que le ha venido respaldando, mucho menos. Algo ha quedado demostrado, los tentáculos del Diablo aún permanecen activos y actuantes. No hay abierta, ni puede haberla, ninguna vía de conciliación; es por ello que Donald Trump ha sido prudente y ha aceptado una transición pacífica, pero no validará con su presencia la asunción al Poder de Joe Biden y de Hamala Harris, que no son sino la máscara de los Obama, de los Clinton, de Silicon Valley y, especialmente, de George Soros, de los Rockefeller y de los Rotschild.
México y AMLO se deben mirar en ese espejo, porque están anotados como el próximo blanco. La defensa de la Soberanía, enarbolada por AMLO, es un obstáculo para los intereses de esta élite ciega, sedienta de sangre y ansiosa por consolidar su Nuevo Orden Mundial y su “Singularidad Transhumanista”. La liberación del General Cienfuegos es parte del Plan oscuro para darle sustento armado a una oposición blandengue, que carece de respaldo popular.
